Ya llegan los jovenes de Calidris ferruginea

Foto: Pedro Marín / GOTUR.

Ya empiezan a llegar los juveniles de Correlimos zarapitín (Calidris ferruginea) esta especie realiza una migración diferencial, es decir los jóvenes irán aumentando en numero y los adultos cada vez serán mas escasos hasta desaparecer, entonces los jóvenes continuaran su viaje al continente africano sin la ayuda de los adultos, esto parece sugerir que el aprendizaje de sus rutas migratorias no es aprendido si no congénito, y no es cualquier cosa el asunto, teniendo en cuenta que son aves de largo recorrido: almenos parte de su poblacion mundial viaja desde el Ártico siberiano asta las zonas atemperadas de África, cruzando el Rift, (el valle de los grandes lagos, como el Tanganyika, Victoria, Malawi, para en primavera subir por l Bósforo y de nuevo al ártico concretamente la península del Taimir donde la tundra les ofrece el ecosistema ideal para su reproducción, 24 h de luz y multitud de invertebrados para alimentarse, eso si primero tendrán que esquivar los tiros de los cazadores locales a su llegada, luego tendrán que esperar a ver si el año del Lemmings (roedor de la tundra) es productivo y los depredadores como el Zorro ártico los dejan en paz y no depredan sus huevos y pollos, si finalmente se desarrollan por completo tendrán que atravesar la Europa continental donde la vida industrial les dará mas de un disgusto, con lodos contaminados, destrucción del hábitat, molestias de todo tipo, y depredadores.

Entre medias en su paso por la cuenca mediterránea, y en especial la Albufera se sentirán observados por teleobjetivos de los bien intencionados Birdwatching y unos locos por la noche los atraparan y anillarán para ver si se puede dar algo de luz sobre las rutas migratorias, supervivencia etc... de esta especie, después de un pequeño susto y de cargar para toda su vida con el DNI (anilla metálica alfanumérica) continuaran hacia África donde sin duda tendrán que superar otro tipo de dificultades, en esas latitudes nunca soltarían un ave, sencillamente es un recurso mas de la naturaleza para alimentarse, con suerte dentro de varias años es posible que nosotros u otro anillador recupere esta ave viva o muerta y sepamos mas acerca de ella, sin duda esta avecilla mediana nos da una lección de constancia, resistencia y en definitiva de supervivencia.

¡¡¡¡¡ Y parece nada cuando por unos minutos la observamos en un campo baldío de arroz de nuestra querida Albufera!!!!

Y ahora la jornada limicolera

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